El Vinagre Balsámico de Módena es un condimento saludable que casa perfectamente con la alimentación de quien desea mantener su peso bajo control o comer de manera natural. Como hemos visto en nuestro artículo acerca de las propiedades beneficiosas del vinagre balsámico, las ventajas para la salud que brinda este ingrediente son múltiples y no se limitan únicamente a su empleo en la cocina: sus propiedades antioxidantes y antisépticas también hallan aplicación en la cosmética natural.
Si te preguntas qué tiene que ver la cosmética natural con el vinagre, piensa que ya en la antigüedad este ingrediente se utilizaba en tintes para el cabello y tratamientos para la piel. La propia etimología del término balsámico remite a su antiguo uso como preparado con propiedades antisépticas y antiinflamatorias, que lo situaban en el campo de los medicamentos antes incluso que en el de los alimentos, hasta el punto de que se empleaba como desinfectante frente a heridas e infecciones. Por otro lado, el vinagre siempre se ha utilizado como conservante natural y se ha aprovechado su acidez para conservar los cosméticos.
Las propiedades antisépticas del vinagre balsámico están ligadas a su uso como purificador de la piel: aplicando vinagre balsámico en el rostro se pueden combatir el acné y la piel grasa; de ahí que hoy día existan cosméticos a base de vinagre balsámico que se valen de su acción frente a problemas dérmicos. Incluso existen balnearios que ofrecen tratamientos con vinagre balsámico para purificar el cutis y mejorar su elasticidad.
El balsámico también es bueno para la piel y el cabello por sus propiedades antioxidantes, debido a que es un ingrediente rico en flavonoides, elementos químicos presentes de manera natural en la uva que ayudan a combatir los radicales libres, causantes del envejecimiento cutáneo y el estrés capilar. Así es, los polifenoles de la uva refuerzan el sistema inmunitario y enlentecen el envejecimiento celular.
La línea Volare de Acetaia Leonardi nace como línea de cosméticos y productos para el hogar que se valen de las propiedades naturales del balsámico: el efecto antioxidante de los polifenoles de la uva, la acción purificante y antiséptica del vinagre y, por último, pero no menos importante, el inconfundible aroma del balsámico, que proviene de las maderas de las barricas en las que se añeja poco a poco a lo largo de décadas.
La línea incluye cremas antienvejecimiento para el rostro con Aceto Balsamico di Modena IGP y extractos biológicos de flores, de acción emoliente y antiarrugas, para una piel relajada, luminosa y tersa. Entre los ingredientes se hallan presentes asimismo extractos de algas marinas, ricas en mucílagos y sales minerales, que favorecen la hidratación y la elasticidad de la piel.
Luego están los jabones, espumas limpiadoras y leches corporales con pH fisiológico a base de Aceto Balsamico di Modena IGP y extractos biológicos de flores, para una delicada acción limpiadora que respeta el equilibrio natural del manto hidrolipídico cutáneo, además de cremas protectoras de manos con acción nutritiva y lenitiva.
Esta línea cosmética se distingue por preferir el uso de ingredientes naturales y evitar el uso de parabenos, aceite de parafina, siliconas y colorantes; por ello también pueden servirse de la misma personas con una piel muy sensible que busquen cosméticos naturales delicados.
Por último, la línea incluye diversos productos para perfumar los ambientes, como aerosoles y ambientadores balsámicos, caracterizados por su fragancia suave y afrutada con notas especiadas, que recuerdan las maderas de las barricas en las que se afina el Vinagre Balsámico de Módena Leonardi durante más de quince años.
¡Gracias a esta innovadora línea, el Aceto Balsamico di Modena IGP puede ser un verdadero placer para todos tus sentidos!
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